-
Isaías 7:1
En los días del rey Acaz, dos reyes malos vinieron para pelear contra Jerusalén.
-
Isaías 7:2
Y cuando el rey Acaz y su pueblo oyeron esto, tuvieron mucho miedo.
-
Isaías 7:3
Pero Dios le dijo a Isaías: “Ve y dile a Acaz que no tenga miedo”.
-
Isaías 7:4
Dios le dijo: “Dile que esté tranquilo, porque esos reyes no van a tener éxito”.
-
Isaías 7:5
Porque los reyes de Siria y de Israel han hecho planes malos contra ti, Acaz.
-
Isaías 7:6
Ellos dijeron: “Vamos a atacar a Judá y a vencerlo”.
-
Isaías 7:7
Pero Dios dice: “Eso no va a pasar”
-
Isaías 7:8
Dios dice: “La capital de Siria es Damasco y el rey de Damasco es Rezín.”
-
Isaías 7:9
“La capital de Israel es Samaria y el rey de Samaria es el hijo de Remalías.”
-
Isaías 7:10
Dios le habló otra vez a Acaz y le dijo:
-
Isaías 7:11
“Pide una señal a Dios, Acaz. Puede ser en el cielo o en la tierra.”
-
Isaías 7:12
Pero Acaz respondió: “No quiero pedir una señal. No quiero tentar a Dios”.
-
Isaías 7:13
Entonces Isaías dijo: “Escuchen, casa de David, ¿no les basta cansar a los hombres sino que también cansan a Dios?”
-
Isaías 7:14
Dios mismo les dará una señal: “Miren, la virgen tendrá un hijo y lo llamarán Emanuel”.
-
Isaías 7:15
Ese niño comerá cuajada y miel hasta que sepa elegir entre el bien y el mal.
-
Isaías 7:16
Antes de que ese niño sepa rechazar lo malo, la tierra de esos dos reyes que te dan miedo quedará desierta.
-
Isaías 7:17
El Señor traerá un tiempo de problemas como nunca antes, desde que Efraín se separó de Judá. Vendrá el rey de Asiria.
-
Isaías 7:18
En aquel día, el Señor llamará a las moscas de Egipto y a las abejas de Asiria.
-
Isaías 7:19
Vendrán y se posarán en los valles empinados, en las grietas de las rocas, en todos los espinos y en los pastos.
-
Isaías 7:20
En ese día, el Señor se valdrá del rey de Asiria para afeitar la cabeza y la barba, y cortar el vestido de los que están en la tierra.
-
Isaías 7:21
En aquel día, una persona se conformará con una vaca y dos ovejas.
-
Isaías 7:22
Y debido a tanta leche darán cuajada, y todos los que queden en la tierra comerán cuajada y miel.
-
Isaías 7:23
En aquel día, en el lugar donde había mil vides que valían mil monedas de plata, crecerán espinos y cardos.
-
Isaías 7:24
La gente irá allí con flechas y arco porque toda la tierra estará llena de espinos y cardos.
-
Isaías 7:25
Y en las lomas donde cultivaban la tierra con el azadón, no irán por miedo a los espinos y cardos; se convertirán en lugar de pasto para los bueyes y de pisoteo para las ovejas.