Índice de contenido

Ezequiel 1

Ezequiel 1

  • Ezequiel 1:1

    Un día, mientras estaba a la orilla del río Quebar, vi algo muy maravilloso.

  • Ezequiel 1:2

    Era el quinto año en que Joaquín estaba como prisionero.

  • Ezequiel 1:3

    Dios habló a Ezequiel, el hijo de Buzi, y yo pude escuchar Su voz y ver visiones increíbles.

  • Ezequiel 1:4

    Vi un viento muy fuerte que venía del norte, y un gran nube con fuego dentro y alrededor de la nube había un resplandor.

  • Ezequiel 1:5

    En la nube vi cuatro seres vivientes, que tenían forma humana, pero cada uno tenía cuatro caras y cuatro alas.

  • Ezequiel 1:6

    Cada uno de ellos tenía una cara adelante, otra detrás, otra a la derecha y otra a la izquierda.

  • Ezequiel 1:7

    Sus piernas eran rectas y sus pies brillaban como bronce pulido.

  • Ezequiel 1:8

    Debajo de sus alas tenían manos humanas, y sus alas tocaban unas con otras.

  • Ezequiel 1:9

    Se movían sin girar, siempre iban hacia adelante.

  • Ezequiel 1:10

    La cara del frente era de hombre, la del lado derecho era de león, la del lado izquierdo de buey y la de atrás era de águila.

  • Ezequiel 1:11

    Sus alas estaban extendidas hacia arriba, dos alas tocaban las de sus compañeros y con las otras dos cubrían sus cuerpos.

  • Ezequiel 1:12

    Se movían en la dirección que quería el espíritu, siempre avanzaban sin girar.

  • Ezequiel 1:13

    Entre los seres vivientes había algo que brillaba como carbón encendido o como antorchas, y este fuego iba y venía entre ellos y tenía un resplandor, también había relámpagos.

  • Ezequiel 1:14

    Los seres iban y venían rápidamente, como relámpagos.

  • Ezequiel 1:15

    Al mirar a los seres vivientes, vi una rueda sobre la tierra junto a cada uno de ellos.

  • Ezequiel 1:16

    Las ruedas brillaban como topacio, y las cuatro eran iguales. Parecían estar hechas de una rueda dentro de otra rueda.

  • Ezequiel 1:17

    Podían moverse en todas direcciones sin girar.

  • Ezequiel 1:18

    Sus aros eran altos y aterradores, llenos de ojos por todo su alrededor.

  • Ezequiel 1:19

    Cuando los seres se movían, las ruedas se movían con ellos; cuando se elevaban del suelo, también se elevaban.

  • Ezequiel 1:20

    Donde el espíritu iba, ellos iban, y las ruedas se elevaban con ellos, porque el espíritu de seres estaba en las ruedas.

  • Ezequiel 1:21

    Cuando los seres se movían, las ruedas también se movían; cuando se detenían, las ruedas se detenían; y cuando se elevaban, las ruedas también.

  • Ezequiel 1:22

    Encima de las cabezas de los seres había algo parecido a un cielo hecho de cristal brillante, extendido sobre sus cabezas.

  • Ezequiel 1:23

    Bajo este cielo, las alas estaban rectas las unas hacia las otras, cada ser cubría su cuerpo con dos alas.

  • Ezequiel 1:24

    Cuando se movían, las alas hacían un ruido como de aguas grandes, como la voz del Todopoderoso.

  • Ezequiel 1:25

    Y cuando se detenían, bajaban las alas.

  • Ezequiel 1:26

    Encima del cielo que estaba sobre sus cabezas, vi algo parecido a un trono de zafiro, y sentado en el trono, vi una figura que parecía un hombre.

  • Ezequiel 1:27

    Desde lo que parecía su cintura hacia arriba, vi algo brillante, como metal encendido con fuego, y desde lo que parecía su cintura hacia abajo, vi algo como fuego.

  • Ezequiel 1:28

    Era como el arcoíris en medio de la lluvia. Esa era la apariencia de la gloria del Señor. Al verla, caí sobre mi rostro y escuché la voz de uno que hablaba.